La Junta de Castilla y León da luz verde definitiva a la revisión del catálogo arquitectónico de la villa burgense. Esta actualización, que afecta a un total de 478 inmuebles, ajusta los niveles de salvaguarda patrimonial e introduce nuevas normativas para instalaciones modernas como las placas solares.
La Comisión Territorial de Medio Ambiente y Urbanismo de Soria ha aprobado de forma definitiva la Modificación Puntual n.º 17 del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de El Burgo de Osma. Según consta en el Boletín Oficial de Castilla y León (BOCyL) publicado este jueves, 7 de agosto, la medida fue promovida por el propio Ayuntamiento de la localidad y recibió el visto bueno en la sesión celebrada el pasado 29 de julio.
El objetivo principal de esta modificación es actualizar las condiciones de protección ambiental establecidas en el Catálogo Arquitectónico para los inmuebles del Conjunto Histórico. Además, se han revisado todas las fichas de estas edificaciones y se han añadido tres inmuebles con escudos o blasones situados en Osma, fuera del perímetro del Conjunto Histórico principal.
El proceso ha contado con todos los informes sectoriales favorables y superó un periodo de información pública de dos meses sin que se presentara ninguna alegación, según certificó la Secretaría municipal. La aprobación inicial se produjo en el pleno de octubre de 2024 y la provisional, en el de junio de 2025.
El detalle de los cambios: 191 inmuebles ven reducida su protección
La revisión afecta a un total de 478 edificaciones con protección ambiental. De estas, más de la mitad, concretamente 283, mantienen su actual grado de protección. Los cambios se concentran en los 195 inmuebles restantes, donde la tendencia general ha sido una disminución del nivel de exigencia, motivada por rehabilitaciones previas, sustituciones o la desaparición de edificios que se encontraban en ruina.
De este modo, mientras que cuatro aumentan su grado de protección, la gran mayoría, 191 edificaciones, lo disminuyen. La reducción más significativa se debe a la supresión de la protección ambiental de tipo C, la más laxa del catálogo, al considerarse que la aplicación de la ordenanza general del Conjunto Histórico ya es suficiente para su correcta conservación. Esta medida afecta a 110 inmuebles.
Otras reducciones destacadas, que en conjunto representan el 68 % de los inmuebles que disminuyen su protección, son:
- 17 inmuebles que pierden la protección de grado B.
- 3 inmuebles que pasan del grado A-2 a no tener protección específica.
- 36 inmuebles que pasan del grado A-1 al A-2 (un 19 % del total de reducciones).
- 15 inmuebles que bajan del grado A-2 al B (un 8 % del total).
Actualización de fichas y edificios descatalogados
La modificación justifica de manera pormenorizada cada uno de los cambios. En el caso de los inmuebles que se descatalogan, se ha decidido mantener sus fichas dentro del Catálogo, aunque señaladas como «sin protección». Según el informe técnico, esta decisión ayuda a «mantener una numeración correlativa en el mismo sin cambios drásticos» que dificulten la consulta respecto al documento original.
Asimismo, se ha aprovechado la revisión para realizar una puesta al día de la documentación. En las fichas modificadas se corrigen direcciones y se actualizan las fotografías, además de ajustar las observaciones de protección cuando ha sido necesario.
Nuevas normas para placas solares y telecomunicaciones
Un aspecto relevante de la actualización es la introducción de una regulación específica para la implantación de instalaciones fotovoltaicas y de telecomunicación en el ámbito del Conjunto Histórico. Aunque se menciona expresamente en la Memoria Vinculante, el informe de la Comisión recalca la importancia de este punto para guiar las futuras intervenciones en la villa.
La aprobación definitiva de esta modificación del PGOU ya puede ser consultada por cualquier ciudadano en el portal de Urbanismo de la Junta de Castilla y León (PLAU). El acuerdo no requiere de una evaluación ambiental estratégica, conforme a la legislación vigente.